Restaurar los humedales de Kigali para acelerar la resiliencia climática

Gracias a su esfuerzo por restaurar los humedales urbanos, Kigali está mitigando el riesgo de inundaciones y convirtiéndose en un ejemplo de desarrollo resiliente.

El humedal restaurado de Nyandungu, en Kigali (Ruanda).

En las dos últimas décadas, Ruanda - el país de las mil colinas - ha hecho notables progresos: la pobreza ha disminuido significativamente y la calidad de vida ha mejorado. Han florecido los sectores de servicios, industrial y agrícola. Incluso tras la pandemia del COVID-19, Ruanda ha confirmado su capacidad de recuperación económica: La tasa de crecimiento del PIB alcanzó el 10% en 2021 y el país va camino de alcanzar la categoría de renta media en 2035.

Cómo el cambio climático pone a prueba la resistencia y el crecimiento económico de Ruanda

A pesar de estos avances, los retos persisten. Con el fortalecimiento de las industrias y la expansión de las zonas urbanas, la demanda de suelo ha puesto a prueba los recursos naturales del país y ha provocado la conversión de muchos ecosistemas naturales. La capital, Kigali, con más de 1,2 millones de habitantes, ha cuadruplicado su huella física de 25 km2 a 115 km2 en las últimas décadas. Al mismo tiempo, el cambio climático ha provocado alteraciones en los patrones típicos de precipitaciones y tormentas más intensas. Estas transformaciones, unidas a la pérdida de zonas verdes para la gestión natural de las aguas pluviales y a la singular topografía accidentada de la ciudad, han aumentado drásticamente el riesgo de inundaciones en Kigali. En los últimos años, la ciudad ha sufrido numerosas inundaciones que no sólo han dañado las infraestructuras, sino que también se han cobrado vidas humanas. Un estudio concluyó que las pérdidas directamente atribuibles al cambio climático en Ruanda podrían alcanzar una media del 1% anual de aquí a 2030. Esta presión sobre los recursos fiscales, agravada por la necesidad de un rápido despliegue de infraestructuras y prestación de servicios urbanos, amenaza con perjudicar los objetivos de desarrollo socioeconómico de Ruanda.

Liberar la resiliencia urbana: Una estrategia global para un futuro resiliente

En respuesta, la ciudad de Kigali está adoptando un enfoque integral para abordar eficazmente estos acuciantes retos climáticos, con especial atención a la mitigación del riesgo de inundaciones, tanto ahora como para las generaciones futuras. Hacer frente a las inundaciones requiere una estrategia polifacética que abarque todos los ámbitos de la planificación urbana integrada, desde la conservación de las zonas naturales y la biodiversidad hasta la promoción de enfoques inteligentes del crecimiento. En Kigali, el Proyecto de Desarrollo Urbano de Ruanda II (RUDP II), un proyecto de cinco años para mejorar el acceso a los servicios básicos, aumentar la resiliencia y fortalecer la planificación urbana integrada, está proporcionando un marco para la gestión eficaz de las inundaciones y el crecimiento urbano resistente al clima. Este esfuerzo está financiado por el Banco Mundial y Global Environment Facility (GEF), el Fondo Nórdico de Desarrollo y el Gobierno de Ruanda, y cuenta con el apoyo de UrbanShiftuna iniciativa de cinco años financiada por GEF para promover enfoques integrados de planificación urbana sostenible.

Visita al proyecto de restauración del humedal de Nyandungu, en Kigali.

Los avances de Kigali tienen una gran importancia, no sólo para el desarrollo continuado de Ruanda, sino también como modelo valioso para las ciudades que se enfrentan a retos similares en todo el mundo. A través de UrbanShift, cuyo objetivo es aumentar la capacidad de las ciudades de todo el mundo en materia de desarrollo urbano integrado, Kigali comparte sus mejores prácticas y lecciones aprendidas para el crecimiento urbano sostenible, al tiempo que se inspira y aprende de otras ciudades similares. Como una de las 23 ciudades de la red UrbanShift , Kigali acogió una Academia de Ciudades UrbanShift en mayo de 2022, durante la cual líderes de otras 20 ciudades de África participaron en cursos basados en pruebas sobre planificación integrada de la acción climática y soluciones basadas en la naturaleza. Para mostrar estas buenas prácticas en acción, UrbanShift facilitó una visita al Parque Ecoturístico del Humedal Urbano de Nyandungu, para el que la ciudad de Kigali y la Autoridad de Gestión Medioambiental de Ruanda (REMA) han liderado con éxito los esfuerzos de rehabilitación en los últimos años.

Un grupo recorre el humedal de Nyandungu durante la UrbanShift City Academy en Kigali en 2022

Las buenas prácticas se muestran en acción en el Parque Ecoturístico del Humedal Urbano de Nyandungu. 

 

De la degradación a la restauración: Los esfuerzos de Kigali por salvar sus humedales

En Ruanda, los humedales desempeñan un papel vital en la rica biodiversidad del país: son el hogar de numerosas especies de aves, peces y plantas endémicas, actúan como filtros naturales de los suministros locales de agua y amortiguan las aguas pluviales durante los periodos de fuertes lluvias. La rápida urbanización de Ruanda ha amenazado la integridad de sus zonas húmedas, provocando la pérdida de algunos humedales y la degradación -la más rápida de todos los ecosistemas ruandeses- de muchos otros. En la zona este de Kigali, la industrialización y la degradación del humedal de Nyandungu han agravado la vulnerabilidad de la ciudad a las inundaciones.

Conscientes de ello, la ciudad de Kigali y REMA pusieron en marcha en 2016 un amplio esfuerzo para restaurar la zona y convertirla en un humedal en pleno funcionamiento. Mediante un proyecto plurianual de 5 millones de dólares, REMA liberó la zona de humedales de actividades industriales contaminantes, lo que permitió que el bosque de higueras autóctonas y los arroyos y estanques de los humedales se regeneraran de forma natural. La agencia plantó más de 17.000 árboles y plantas de 55 especies autóctonas, que reforzaron la biodiversidad local y proporcionaron hábitat a insectos, aves, reptiles y mamíferos. Ahora, el humedal restaurado de 120 hectáreas vuelve a funcionar a pleno rendimiento para limpiar y filtrar el suministro local de agua. El aumento de la cubierta vegetal y de los caudales de agua refresca los alrededores y proporciona un lugar de descanso a residentes y visitantes. El enfoque ejemplar que ha adoptado Kigali en el humedal de Nyandungu ilustra los esfuerzos de la ciudad por abordar de forma integral sus retos climáticos y de desarrollo.